“España no es un país para niños” se dijo en la mesa coloquio sobre custodia compartida organizada por la Fundación ATYME
Trinidad Bernal, directora de la Fundación ATYME y coordinadora de la mesa, la inició comentando cómo los cambios sociales han incidido en la forma de funcionar en pareja, dando lugar a diversas maneras de organizarse la familia, lo que supone nuevos retos para la pareja conviviente. Y, aún son más evidentes cuando ésta deja su convivencia y tiene que seguir ocupándose de sus hijos en un nuevo escenario familiar.
La custodia compartida es una expresión de este cambio social, aunque es un concepto abstracto y susceptible de variados significados que pone en evidencia la insuficiencia de la ley para dar respuesta al conflicto que las familias presentan en esta nueva sociedad cambiante.
Los progenitores no se van a implicar en la vida de sus hijos porque un juez lo diga. Se necesita contar con otros espacios para que puedan poner en relación sus puntos de vista y ellos sean los que den las claves para que se dé esa implicación.
Esta mesa está diseñada con el objetivo de aportar sugerencias sobre cómo ayudar a los padres y madres a caminar hacia el consenso.
“Los padres deben ponerse de acuerdo para llevar a cabo una custodia compartida que beneficie en especial a los niños”, comenzó diciendo uno de los ponentes, Luis Aurelio González Martín, Magistrado del Juzgado de Familia 29 de Madrid. Según su opinión, la estabilidad y bienestar de los hijos debe ser la prioridad en un proceso de custodia compartida y los padres deberían aprender a ponerse de acuerdo antes de llegar a un litigio judicial que puede resultar más costoso e impositivo para una familia; incluso, en su opinión, las parejas deberían asistir a terapia psicológica antes de iniciar un pleito, ya que un divorcio es un golpe muy fuerte que desestabiliza a las personas y no les permite ver con objetividad lo que realmente les beneficia a ellos y, en especial, a los hijos.
En esta misma línea, la ponente Mª Ángeles Peña Yánez, Psicóloga de los Equipos Técnicos de los Juzgados de Familia de Málaga, manifestó que aunque el divorcio es muy difícil, las personan tienen el mito de asociarlo con una batalla, dándole una connotación exclusivamente negativa en la que se gana o se pierde y en la que no existe la posibilidad de que ambas partes ganen cuando, según su opinión, todos los integrantes de la familia pueden ganar gracias a la custodia compartida, que bien gestionada, puede permitir el desarrollo personal de padres e hijos y su tranquilidad emocional. Según Mª Ángeles Peña, la custodia compartida, acompañada de un proceso de mediación y no de una sentencia impuesta por un juez, funciona en todas las familias, eso sí, teniendo en cuenta las circunstancias de cada persona.
No obstante, el esfuerzo no sólo debe partir de las familias sino que deben existir apoyos sociales que permitan llevar a cabo procesos de custodia compartida eficaces a través de mecanismos como la mediación. El ponente José Miguel Fernández Dols, Catedrático de psicología social de la UAM y patrono de la Fundación ATYME, denunció que “España no es un país para niños”, debido a que muchas veces no se invierte en medidas que les beneficien y les hagan ser más felices, como es el caso de la custodia compartida por acuerdo de los padres. Según sus palabras, no se invierten recursos en la preparación de profesionales que asesoren y guíen un proceso de custodia compartida, con protocolos claros de actuación.
Sin embargo, la falta de inversión no es la única problemática en la implementación de la mediación sobre procesos de custodia compartida, sino que los medios de comunicación también desconocen este recurso y muchas veces no disponen de la información necesaria para transmitir los resultados y efectos sociales que la mediación puede generar en beneficio de las familias para lograr acuerdos pacíficos, alineados con las emociones, valores y circunstancias de los padres, según manifestó Javier Fernández Arribas, periodista y director de la revista Atalayar.
Finalmente, se abrió un coloquio entre los ponentes y los asistentes al evento que dejó reflexiones muy interesantes sobre la situación actual de la custodia compartida en España, que debe seguir evolucionando en todas los ámbitos que la afectan, como son el jurídico, el psicológico y el social; con el apoyo de la difusión correcta de los medios de comunicación, de la inversión de recursos y de la propia conciencia de los padres, que deben empezar a romper el mito de la separación como guerra para convertir lo en una oportunidad de tener relaciones más sanas, gracias a la mediación en los procesos de custodia compartida.







